Ecosinnova

Eco, del griego oikos (οίκος) significa hogar.

En Ecosinnova, reconocemos que todos los seres vivientes compartimos un espacio común, el espacio de consciencia desde el que todo se manifiesta, dando pie a la expresión de multiples formas en este universo.

Este hogar, este espacio que cada vez habitamos desde nuestro interior con más presencia, nos invita a cada instante a reinventarnos, a transformar las maneras en las que nos relacionamos con nosotros mismos y nuestro entorno.

Este hogar que nos convoca, ha sido, es, y será el hogar de múltiples e infinitas formas de vida, las cuales viven en armonía con los elementos de la tierra, quienes proveen las condiciones necesarias para que la vida se dé de una manera óptima.

En este mundo, así como lo conocemos, han existido y existen formas de intercambio, mediante las cuales los seres vivientes encuentran su sustento y las condiciones necesarias para su supervivencia.

Este intercambio, en una de sus multiples formas, se ha conocido como Economía, que etimológicamente viene del griego oikonomia, que significa la ‘administración del hogar’.

La economía ha tomado millares de formas a lo largo de la historia de la humanidad. Estas formas, se han ido transformando de acuerdo a las necesidades de los seres vivientes, especialmente en relación al rol que los seres humanos han tomado de ser ‘administradores de su entorno’, además de las formas de intercambio que los demás seres vivos tienen en la tierra.

Esta ‘administración del hogar’, de muchos modos, llevó al ser humano a la aparente desconexión de su entorno, creando formas de intercambio a expensas de la armonía de la naturaleza.

Sin embargo, estas formas de intercambio, y de administración del hogar, están retornando cada vez más a lo esencial, a recuperar la armonía intrínseca de todas las demás formas de creación, donde el ser humano es parte integral de la misma.

Esta aparente desconexión, que por mucho tiempo se produjo, se está evidenciando en el presente como el retorno del ser humano a su origen, a formas de intercambio más acorde a su verdadera esencia en comunión con todo lo viviente.

Dentro de algunas de estas formas de intercambio, desde la economía, se reconoce la economía solidaria, la economía circular, la economía popular, la cooperación, la innovación frugal, etc, como formas de intercambio más holísticas, donde el ser humano se reconoce como parte de la naturaleza.

Así, la innovación también entra a formar parte importante de esta historia. Innovatio, del latín, se refiere al hecho de ‘crear algo nuevo’.

De este modo, en Ecosinnova, reconocemos que este hogar, en el que todos somos, el mismo que todos habitamos, está en constante transformación. Aquellas formas que en algún momento pensamos podrían llevarnos a vivir más en armonía, han requerido de cambios, impulsados por la consciencia y el respeto a la vida en todas sus formas.

Esta innovación, comienza desde adentro, así como lo expresa el vocablo del latin ‘in’, ‘hacia adentro’, cualquier transformación que se requiera en el afuera, comienza desde el centro, desde el interior del ser, desde la consciencia que permite la manifestación de las demás formas vivientes.

Así, al regresar a nuestro interior, a nuestro hogar más intimo, reconociendo la importancia de este viaje evolutivo, contribuimos a que se produzcan cambios en aquello que se manifiesta ‘fuera de mí’, que tambien hace parte de eso que soy yo.

Yo soy, aquello que tú eres, aquello que somos todos.

Por eso, la palabra ‘social’, del latín, socialis, nos recuerda que somos pertenecientes a una comunidad, donde encontramos ‘socius’, compañeros de ruta, seguidores, donde aprendemos a reconocernos, y a seguirnos unos a otros.

Así, ese hogar ‘Eco’ (oikos), para ser un hogar común, requiere de un socious. De este modo, en EcoS-innova reconocemos la importancia ‘del otro’, del amigo, del hermano, de la familia, del otro ser viviente, del entorno, de la comunidad.

Ese hogar de todos, que somos todos, es y se transforma al compas del latir de cada corazón y de un mismo corazón que a todos nos sostiene.

Por eso, confiamos y sabemos que esta intención, que comienza al compás del latir de algunos corazones, se ha ido expandiendo, y se expandirá a más corazones, recordando el ser que somos todos en unidad.

Gracias por ser, gracias por estar y por hacer parte de este hermoso tejido vivo.